top of page
Buscar

PABLO ANANÍA

Foto del escritor: BRUNCHBRUNCH

Dos en uno


Lo fugitivo, Quevedo, permanece.

Regiones donde hubo

ardientes pero estériles ocasos

sombras dejaron, perfiles entumecidos

pero ocres elevándose

como cuando cautivo de la danza

de deshace el dolor. Tu comprensión

remite sólo al tacto. Tacto

sin embargo que es dicción, lente, sutil

sangre del que predica. ¿Cómo no habrá

de resignarse, Góngora iletrada, sin deseo

carnal, a bogar en sus fingidos lagos

definitivamente secos? ¿Cómo

culterana ha de engarzar en oro

si plebeya de acentuada oftalmía

fastidia los metales con fusiones mezquinas?

¿Es posible, Quevedo, que te obstines

en ceder tu palabra a quien labra ofuscada

con soles baratijas, manjares para el oído?


Ananía (Argentina, Rosario, Pcia. De Santa Fe)




 

Comments


© 2016 por BRUNCH

bottom of page