Gratitud
No sos especial, me dijo.
No sos mejor que nadie, sabelo.
Fue a las pocas semanas de conocernos.
Recuerdo el pelo revuelto,
la boca hinchada de besarnos.
Igual me tenés loquita, dijo,
pero no sos el primero
y a lo mejor tampoco el último.
De esto hace casi veinte años.
Algunas veces, cuando estoy cocinando,
me abraza por la espalda y me lo repite:
no sos especial, no sos mejor que nadie.
Luego de un momento de quietud,
en las sienes, en la garganta siento
el golpeteo tenue del antiguo martillo
y sonriendo me doy vuelta
para darle lo mejor que tengo.
Dema ( Argentina, Pcia. de Córdoba, General Cabrera, 1979)
Comentários